ROZADURAS DE PUERTAS (B)
Herramientas: 1 destornillador plano, 1 martillo, papel de lijar.
Una puerta suele rozar por 2 motivos (son más, pero estos 2 son los más comunes):
- un suelo mal puesto hace que una baldosa toque la base de la puerta.
- Un desgaste de las arandelas de las bisagras.
- En el primer caso intercalar una hoja de papel de lijar entre la puerta y el suelo ala altura del roce.
- Aguantar el papel con una mano mientras damos a la puerta movimientos de vaiviene
lijando la madera poco a poco hasta que desaparezca el roce.
- En el segundo caso, abrir la puerta perpendicularmente al marco.
- Asiendo las manillas, estirar la puerta arriba hasta sacarla de sus goznes. Si se resiste puede moverla de derecha a izquierda. Si se resiste demasiado, introducir un destornillador debajo de ella y hacer palanca.
- Quitar las arandelas desgastadas. Todas. Remplazarlas.
- Reponer la puerta.